Up2Me

Up2Me tiene como objetivo la formación integral y el crecimiento armonioso de la Persona, así como el descubrimiento y la internalización del valor de la afectividad y de la sexualidad.

PARADIGMA

La visión antropológica que está a la base del proyecto es “la persona-relación”. “Las unidades didácticas de Up2Me” toman en consideración seis dimensiones de la persona: corporal, emocional, intelectual, social, espiritual, histórico-ambiental.

Contexto

Muchos son los problemas a los que se encuentran hoy día los pre adolescentes y adolescentes: La fragilidad emocional, la falta de capacidad de tomar decisiones que tengan como objetivo un proyecto de vida, la fragmentación, la carencia de la presencia de las agencias educativas tradicionales.
Los padres, en muchas ocasiones, carecen de preparación para afrontar adecuadamente la formación afectiva sexual de sus hijos y por otra parte, la información que reciben en la escuela o a través de los medios de comunicación en muchos casos suele ser parcial o superficial respecto de la integridad humana, la toma de decisiones y sus consecuencias.

Destinatarios

Up2Me está dirigido para el acompañamiento de pre-adolescentes y adolescentes, 9 a 11 años/12 a 14 años/15 a 17 años.

Programa

 10-12 sesiones de 2 a 3 horas de duración cada una. Grupos compuestos de 10 a 20 adolescentes participantes con edades homogéneas.

Frecuencia: quincenal o cada tres semanas.

Dos tutores: un hombre y una mujer para la coordinación y el acompañamiento de los adolescentes. En algunas sesiones es necesaria la presencia de profesionales que colaboran, en equipo, con los tutores.

Resultados

Que los adolescentes se conozcan a si mismos y sean sensibles a la belleza de la vida.
–  El descubrimiento ontológico del “ser en relación” y del valor de la sexualidad.
–  Que tengan una mayor conciencia de los condicionamentos culturales.
–  Que los adolescentes fortalezcan su autoestima.
– Asuman una conciencia de tomar decisiones responsables y descubran la importancia de construir relaciones auténticas y duraderas.
–  Que sus familias sean sensibles y se involucren en su proceso educativo.

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